miércoles, 9 de septiembre de 2015

La juventud de los noventa años

"El amor de una madre por un hijo no se puede comparar con ninguna otra cosa en el mundo. No conoce ley ni piedad, se atreve a todo y aplasta cuanto se le opone"
 Agatha Christie 




Se suele decir que "madre no hay más que una", pero hablando desde mi caso particular puedo asegurar que yo tengo más de una, e incluso más de dos. Cuento con una madre a la que quiero por encima de todo (sin ella y sin la ayuda de mi padre yo no estaría en este mundo); pero también tengo la gran suerte de contar con dos abuelas maravillosas, tías que me tratan como a una hija y por si fuera poco una bisabuela que ejerce de madre de todos nosotros. 

De ella, de la matriarca por excelencia, es de la que tenemos que pararnos a pensar hoy. Es recomendable y bonito hacerlo siempre pero en una fecha tan especial, como es este 9 de septiembre de 2015 , adquiere un significado diferente. Su cumpleaños, el primero que afronta fuera de su casa pero más cerca que nunca de todos los que la queremos. 

María a su edad es un espíritu jovén. Una mujer con carácter, una mujer que te dice las cosas como son, sin filtros, aunque algunas de ellas te puedan llegar a molestar. Lo hace sin maldad, porque ella es así. Ha vivido una vida plena, ha sido madre de cuatro hijas con el gran amor de su vida; no hay ni un solo día en que la haya visitado que no me hablara de mi bisabuelo Paco. Como le recuerda, con que cariño habla de él, de como se conocieron cuando a ella todavía no le gustaba, pero que fue enamorándola por su forma de ser. De como trataba a mi madre "no había nadie más para tu abuelo Paco que su querida Techu" es una de las muchas frases que no se cansa de repetir. Aunque la vida le dio el palo de apartarle rápido de su lado, mi bisabuela siempre tiró para delante con el apoyo de todos los de su alrededor. Porque María se hace querer.



Ahora que puedo tratarla con más frecuencia me sorprendo a mi misma riéndome con sus comentarios. Es audaz y tiene un sentido del humor muy peculiar. No deja títere con cabeza y aunque dice "que no veee" sabe y se entera de todo lo que pasa a su alrededor. La vida le ha regalado diez nietos maravillosos y cinco bisnietos que la adoran... y si todo sigue como hasta ahora puede que incluso vea un tataranieto en su regazo. 

Le ha tocado vivir este último año en una circunstancia diferente a la que está acostumbrada. Lejos de su casa pero cerca de las personas que realmente la queremos. A sus años tiene la suerte de tener una vitalidad envidiable y unos ojos que maravillan a todos los que lo miran por primera vez. Unos ojos que han visto mucho de esta vida, pero sobre todo unos ojos que no se cansan de brillar y hacernos partícipes de todo el amor que todavía puede darnos. 
Por eso mismo, por todo el amor que ella ha dado sin pedir nada a cambio nunca es por lo que nosotros, su familia, tenemos que corresponderle ahora que es cuando más lo necesita. 

Al fin y al cabo madre no hay mas que una, y ella es... nuestra gran madre. 


¡¡¡Felicididades Maria!!!




martes, 8 de septiembre de 2015

Adiós vacaciones...adiós



La llegada de las vacaciones siempre es un sinónimo de alegría para todo el mundo, y quién diga lo contrario seamos sinceros... miente.
Nos pasamos el año contando los días que quedan para esa quincenita en la que podremos relajarnos, tomar el sol, respirar aire limpio y sobre todo "desconectar", (aunque el término desconectar suene utópico en los tiempos que corren ya que no nos separamos de los móviles en ningún momento)

Pero en lo referente a mi persona he de decir que este año ha sido el primero que trabajaba en verano y he llegado a comprender la sensación de felicidad rebosante con la que mi padre llegaba a casa el día en que comenzaban sus vacaciones. Veía lejano ese 21 de agosto y ahora ya ha pasado como suele hacerlo todo lo que realmente nos hace felices, de manera rápida y sin intención de quedarse.

Como casi todos los años desde que tengo uso de razón (salvando contadas ocasiones en los que he conocido lugares maravillosos) este año he vuelto a lo que yo llamo mi paraíso particular. Ese lugar, que en el caso de los famosos cuando se les pregunta ¿un sitio para perderse? responden cosas como "Bali, Santo Domingo... Ibiza" yo que soy mucho más anónima respondo sin titubear Benicassim. 




Ciudad pequeña a las orillas del Mediterráneo conocida por muchos por su festival de música, el FIB, cuenta con otros encantos entre sus calles. Ahí si que encuentro paz y tranquilidad. Es un lujo el poder levantarse salir a la terraza del apartamento y tomar el desayuno escuchando únicamente el sonido del mar. Porque en Benicassim no hay aglomeraciones, ni peleas entre abuelitos por conseguir la dichosa primera línea de playa. Allí puedes bajar a las once de la mañana y plantar tu toalla donde te de la gana.

Aunque si lo que prefieres es hacer deporte con el carril bici puedes recorrer desde una punta hasta la otra de las muchas playas que hay. Con la brisa del mar dándote en la cara y compartiendo espacio con los patinadores que te adelantan a toda velocidad. O bien puedes tirarte en paracaidas y disfrutar de las vistas desde el aire, pero para disfrutar de buenas vistas lo mejor es recorrer la ruta que une Benicassim con la vecina Oropesa del Mar, donde se juntan acantilados, vegetación y mar.

Como ya he dicho Benicassim es un encanto. Lo mires por donde lo mires, lo huelas por donde lo huelas... y encima si tienes suerte (no como en mi caso) puedes compartir chiringuito con Miguel Angel Silvestre.
 ¿Quien se viene a mi paraiso particular?



Con el comienzo de septiembre son muchos los que deciden recapitular, centrarse y afrontar el último trimestre del año con la misma ilusión que lo comenzaron. Hacer esas pequeñas cosas que han dejado por el camino, retomar relaciones con personas a las que se les tenía algo olvidadas, etc.

Es por ello que yo he decidido ponerme al frente de nuevo de este blog. Cambiándolo, no solo en diseño, sino también en contenido. Seguiré comentando sobre películas, libros, música o cosas que me gusten; pero además he pensado en comenzar un diario. No sé si será diario, semanal, mensual... no puedo prometer nada, lo que si sé es que escribiré.

Creo que la escritura es una buena aliada en los momentos en los que te sientes bajo de ánimo, en esos momentos en los que pegarías un grito y estallarías. Al igual que creo que es una buena herramienta para compartir toda la felicidad que te puede dar un simple detalle. Por eso sé que escribiré. Porque tengo mucho que compartir con todos vosotros soñadores. 

Así que hacedme un huequito a vuestro lado que en nada comienzo...